El futuro de los videojuegos se basará en un modelo gratuito. Y nos referimos incluso para los juegos con calificación triple AAA (es decir, las superproducciones que en muchas ocasiones acaban convirtiéndose en auténticos superventas). Esto simplemente significa que la tendencia es ir hacia un modelo en el que no será necesario pagar un alto precio inicial para adquirir un videojuego; en su lugar se apostará por un acceso gratuito al juego y se monetizará a través de micropagos que los usuarios deberán realizar para poder disfrutar de sus contenidos al completo.
Y es que la próxima generación de videoconsolas llegará a un mercado radicalmente distinto al que se han encontrado sus predecesoras. Un mercado en el que para empezar tendrán que enfrentarse al enorme auge de las plataformas de videojuegos en la nube como OnLive o Gaikai, que se basan en una tarifa plana mensual que permite al usuario acceso a un amplio catálogo de títulos pagando una determinada mensualidad.
Tal y como ha asegurado Peter Moore, ejecutivo de Electronic Arts “al final todos los juegos tendrán microtransacciones, aunque el acceso a los juegos será gratuito”, “no será diferente de cuando paseas por un centro comercial. Nadie te cobra por darte un paseo por ahí, puedo dar una vuelta por un centro comercial, disfrutar de la música, ver los vaqueros… pero si quieres comprar algo al final lo pagas”.