En Estados Unidos las discográficas han tenido que adaptarse a los tiempos que corren. Las grandes multinacionales han tenido que cerrar las grandes tiendas de música para pasar a un nuevo modelo de negocio donde los internautas pueden descargar una gran variedad de música y películas a una gran calidad y a precios muy reducidos.
La venta de música por internet merma la descargas ilegales a través de la Red, aunque no por ello, dejan de existir.
Hasta tal punto la red ha influido en la reconversión del sector audiovisual, que hoy los investigadores de mercado han concluido que la mejor forma de seguir ganando dinero es alinearse perfectamente con los internautas para hacerles llegar una oferta de calidad a un precio despreciable.