Las cosas no pintan bien para la cablera Ono, que con su decisión de realizar un expediente de regulación de empleo, y acabar con 1.300 puestos de trabajo, de forma oportunista y sospechosa, se suma a las empresas, que hacen de la escusa de la crisis, el momento idóneo para aliviar gastos.
Lo más curioso del tema, es que la empresa ha liquidado a todo el frente sindical de la compañía, dejando en un total desamparo a nivel de interlocución a los trabajadores y asesores del sindicato de trabajadores de comunicaciones ( STC ).
Los representantes de los trabajadores de Ono, presentaron ayer ante el Ministerio de Trabajo una solicitud de reunión para valorar la legalidad de este expediente de regulación de empleo, dado que según el acta de acuerdo del ERE realizado en el año 2006, la compañía no podía realizar otro ERE en el plazo de dos años, desde que ocurrió el primero.
Los trabajadores ya han informado a la compañía que realizarán tres paros de cuatro horas en noviembre, y una jornada de huelga total.
Otra nueva situación desagradable que ‘teóricamente se cobra la crisis que sufrimos’. La destrucción de empleo supera ya los 100.000 parados al mes.
Jorgecable
Pues para que tanta gente si la empresa va sin ellos ? ES un poco comunista esta alegacion.
Pepelu
La empresa no funciona sin ellos. No se realiza inversión en el despliegue de red, a consecuencia de ello, el personal de los departamentos de Ingeniería, construcción de red, comercial, contratistas, etc, van a la calle. Sin contar que antes de que se apruebe el espediente de regulación de empleo tambien hay gente que esta siendo despedida. Finalidad sanear números, antes de venderla …